miércoles, 7 de abril de 2010

NO A LOS ELISEOS

Antes de partir,
me salvaré de reproches
y de pasos inciertos.
Dejaré agonías
olvidadas en el reflejo,
en espejos de agua,
en el destello del tiempo.
Vendré cabalgando promesas,
rompiendo silencios,
sentencias.
Pediré respuestas.
Haré hogueras del pasado
para hacer arder el miedo.
Vendré con fe,
dispuesto a nuevas peleas.
Este es mi tiempo.
¡Y esta no es mi muerte!

1995

Soy un hombre ciego
en una habitación oscura.
Me busco
y sólo encuentro
un paisaje a contraluz,
Es la segunda vez
que muero este día.
La primera fue al despertar
y sentir los ojos vacíos.
La segunda
al recordarte.
No es posible arder
sin consumirse.
Nos es posible arder,
vivir todavía.
Hubo un tiempo de imposibles,
días de un destino venturoso.
Hay un tiempo de agonías.
Hay un tiempo.
Siempre hay.
No es posible consumirse
sin arder.
No es posible
entender la noche sin el fuego.
Soy un hombre oscuro
en una habitación cerrada.
Me busco
y sólo encuentro
un bosque de cenizas.